Las víctimas de la pandemia ascienden a números descomunales, pero no es la única amenaza a la que se enfrente la humanidad en estos momentos.
Uno de los males mayores que pasan desapercibidos es la contaminación del aire.
Estudios recientes señalan que la contaminación del aire causada por la quema de combustibles fósiles, provoca alrededor de 8.7 millones de muertes en todo el mundo cada año.
Del total de estas muertes por contaminación el 62% ocurren en la India y China, esto es el equivalente a tres veces lo que la pandemia del coronavirus provoco el año pasado.
Si la contaminación fuera tratada como una emergencia y crisis similar a la pandemia se podría hacer frente a esta. Se deben tratar esas 8.7 millones de muertes por contaminación anual como algo grave y no como un ciclo anual que se ignora para minimizar el problema.
En la actual pandemia se han gastado billones de dólares modificando todo hasta la forma de vivir, esto es clave para saber que si se puede hacer algo ante la contaminación.
En comparación mas de 2.8 millones de personas han muerto a causa del coronavirus frente a 8.7 millones anuales por contaminación del aire.