Impresionantes imágenes captadas por elementos de la Policía Federal de la formación de tornados gigantes en los campos menonitas 70 al 76 de Cuauhtémoc y el poblado de Sainapuchi, Municipio de Riva Palacio.
En los videos se puede apreciar lo impresionante del fenómeno atmosférico y la violencia con la que giró el aire formando una larga y curva columna desde el suelo al cielo.
¿Cómo se producen?
Científicamente, estos fenómenos son columnas de aire en rotación que conectan en la parte superior con una nube de tormenta (de tipo cumulonimbo) y en la base con la superficie terrestre. El aire que se alza en las corrientes ascendentes de las tormentas puede empezar a rotar cuando se ve afectado por vientos que soplan en direcciones diferentes. Sin embargo, para que se desarrolle un tornado es imprescindible que el aire gire cerca del suelo, y esto únicamente ocurre cuando, en las tormentas, el aire se hunde en el suelo y se extiende en forma de ráfagas sobre la superficie terrestre.
De esta forma, el aire más cálido empieza a elevarse mientras que el frío desciende, formando corrientes que generan la rotación. El aire que se encuentra más cerca del suelo se acelera a medida que se acerca al eje de rotación, originando desde el suelo la estructura de ‘embudo’ de los tornados.
¿Cómo se miden los tornados?
Actualmente, los científicos miden los tornados con la ‘Escala de Fujita’, una escala que clasifica la intensidad de un tornado en función de la destrucción ocasionada en las estructuras construidas por los seres humanos y la vegetación. La mayoría de los tornados se mueven a velocidades que oscilan entre los 65 y los 180 kilómetros por hora, pero pueden ser más rápidos incluso si se dan las condiciones adecuadas.
En cuanto a las escala, los tornados EF0 suelen alcanzar los 105 kilómetros por hora y provocar daños leves, mientras que los más intensos (categoría EF5) pueden superar los 322 kilómetros por hora, arrasando con las casas (incluso con las estructuras de hormigón) y destruyendo todo tras su catastrófico paso.

También en los mares
A diferencia de lo que pueden pensar algunas personas, los tornados también pueden producirse en los mares. No obstante, estos son denominados mangas o trombas marinas. La diferencia con los tornados (que se producen en el suelo) es que en su base no tienen tierra, sino agua, pese a que el proceso de formación es completamente idéntico.