Lo más probable es que, en algún momento, te hayas topado con cucarachas blancas en tu casa. Aunque suelen salir con menor frecuencia que las marrones, suelen escabullirse en los lugares más oscuros y menos concurridos, como bajo las repisas o mesones.
Es por ello que, si vemos una, debemos saber por qué aparecen, como actuar y la razón del por qué debemos hacerlo de inmediato. Aunque no lo parezcan, pueden significar un verdadero peligro.
Cucarachas blancas ¿Qué son?
En primer lugar, es necesario aclarar que las cucarachas blancas no son una especie diferente. De hecho, se trata del mismo insecto pasando por una «transición», por la que pasan todas las cucarachas antes de tomar su característico color marrón. Es algo normal que corresponde a su ciclo de vida.
De forma muy similar a las diferentes etapas de la vida de los seres humanos, el ciclo de este grupo de insectos, es de tres etapas: huevo, ninfa con sus estados intermedios, y finalmente, adulto. Se puede decir que su etapa ninfa, es su etapa juvenil, se caracterizan por ser algo más pequeñas que las adultas, pero en cada etapa, va creciendo, hasta alcanzar el estado adulto.
Otra característica de las jóvenes cucarachas, es que las ninfas recién cambiadas de estado, son blancas. Esto quiere decir que cuando nos topamos con una, en realidad estamos viendo una ninfa en proceso de maduración. Específicamente, en una fase de muda que tan solo dura unas cuantas horas.
Teniendo en cuenta que, como todos sabemos, el cuerpo de las cucarachas es muy duro y resistente gracias a su exoesqueleto. Esta se encarga de proteger a los insectos, razón por la que a veces no mueren, a pesar de que las aplastemos. Sin embargo, cuando la cucaracha ninfa realiza la muda para pasar a la etapa adulta, su exoesqueleto se hace débil y blanco durante unas diez o doce horas. Al pasar este tiempo, se endurece, tomando su color oscuro característico.
¿Por qué actuar de inmediato?
Los especialistas recomiendan actuar con la mayor rapidez posible, ya que el avistamiento de cucarachas blancas, indica que la población de cucarachas adultas en el hogar o cerca de él, está creciendo. A su vez, el problema requiere atención rápida, porque es muy probable que no sea la única ninfa cerca y, al llegar a su etapa adulta, tendrán el potencial de reproducirse y generar una plaga difícil de controlar.
Así que, lo primero que debemos hacer es intentar determinar el lugar de donde provienen o donde están anidando. Después, aplicar el tratamiento adecuado y si es posible, de manera directa. Hay que considerar primero los lugares oscuros y húmedos, que sean de difícil acceso para nosotros.
Así mismo, hay que verificar todas las grietas de la casa, debajo de muebles, drenajes o cualquier agujero donde se puedan alojar. En caso de que la plaga esté demasiado avanzada, lo mejor es llamar a un especialista.
Recuerda que estos insectos siempre traen enfermedades y pueden llegar a contaminar nuestras comidas. Pueden representar un peligro para niños, incluso para adultos, así que debemos estar muy pendientes si vemos cucarachas blancas en nuestro hogar
