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Teragnosis: una nueva terapia eficaz contra el cáncer de próstata.

Un nuevo tratamiento que fusiona diagnóstico y terapia, ha logrado aumentar hasta aproximadamente un 35% la expectativa de supervivencia en personas afectadas por cáncer de próstata con características de metástasis, la investigación fue desarrollada en el Hospital Universitario de Heidelberg, Alemania.

 

Se le ha denominado Teragnosis, José Luis Carreras, médico, suele sentir emoción cuando habla de este procedimiento, una peculiar estrategia que actúa con una precisión asombrosa en contra de las células nocivas de diversos tipos de cáncer.

Carreras es el jefe de Medicina Nuclear en el Hospital Clínico San Carlos, en Madrid, cotidianamente suele hablar sobre “resultados sorprendentes” en algunos pacientes en estado terminal.
El médico dió a conocer el caso de un hombre alemán de 62 años, el cual presentó cáncer de próstata y una diseminación masiva con metástasis en los huesos.
Al paciente le fue aplicado un tratamiento experimental basado en teragnosis en la Clínica Central de Bad Berka (Alemania), posteriormente 8 meses después de haber recibido el tratamiento, no se observaron señales de cáncer, volviendo a retomar su vida cotidiana (regresó a trabajar y a hacer deporte), 3 1/2 años después seguía sin mostrar ningún tipo de sintomatología de cáncer.
Carreras mencionó este caso en febrero del mes en cursos, durante una sesión científica en la Real Academia Nacional de Medicina, en Madrid.

Teragnosis: una nueva terapia - Teragnosis: una nueva terapia

En el congreso que se celebra de forma anual por parte de la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO) y que recientemente ha sido celebrado, la Teragnosis fue el tema que protagonizó el evento,
El término teragnosis corresponde a la combinación de dos palabras: terapia y diagnóstico.
A través de una misma molécula es posible realizar el diagnóstico de la enfermedades así como llevar a cabo su respectivo tratamiento. Esta técnica ha sido aplicada duarante varias décadas en el tratamiento del cáncer se tiroides, actualmente su aplicación ha arrojado resultados bastantes prometedores en otro tipo de tumores cancerígenos, como por ejemplo aquellos de orígen neuroendocrinos y, sobre todo, el cáncer de próstata, el cual suele ser el más frecuente en los hombres.

Michael Morris, médico del Centro Oncológico Memorial Sloan Kettering, en Nueva York, presentó en el reciente congreso de ASCO, los más recientes resultados de la teragnosis en el combate contra el cáncer de próstata avanzado.
Explicó cómo es aplicada la técnica, y mencionó que de manera básica consiste en en la utilización de una molécula con alta afinidad por la PSMA, la cuál es una proteína que se encuentra presente en vantidad s extensas en las células del cáncer de próstata.
Para poder llevar a cabo el correcto diagnóstico, la molécula afin al PSMA debe ser unida a un elemento químico radiactivo, en este caso el galio-68, el cual tiene propiedades que suelen brillar en las exploraciones realizadas mediante las tomografías por emisión de positrones (PET).
Para el tratamiento que requiere cada paciente, la misma molécula utilizada debe ser unida a otro elemento químico, el lutecio-177, elemento que a su vez suele emitir radiación local, logrando anular y matar a las células cancerígenas.
El procedimiento es similar al “disparo de una flecha equipada con una bombilla, y posteriormente otra flecha con una carga explosiva”.

Carrera dice:
“Esto no es matar moscas a cañonazos, como otras técnicas. Es ir directamente a la célula tumoral y destruirla ‘in situ”.
En el ensayo de Morris se obtuvo la participación re 831 pacientes con cáncer de próstata , los cuales presentaban resistencia a la castración y metástasis, con un tipo de tumoración que de forma cotidiana suelen ser mortales.
Aquellos enfermos a los cuales les fue aplicado el tratamiento con teragnosis, vivieron 15,3 meses, frente a los 11,3 meses de los hombres a los que se administró una terapia estándar.
Aunque 4 meses parezca una diferencia insignificante, significa un 35% más de vida en pacientes desahuciados, pacientes en los que diversos tratamientos como la quimioterapia y los tratamientos hormonales no arrojaron ningún tipo de resultados favorables.

José Luis Carreras deja claro que la extensión de los 4 meses de supervivencia obtenidos, son un promedio.
“Hay casos que no responden, pero hay algunos en los que la mejoría es espectacular”, señala.
El equipo de investigación del Hospital Clínico San Carlos, tiene planes de comenzar a participar en el mes de septiembre en 2 ensayos clínicos de teragnosis frente al cáncer de próstata avanzado.
“Esto no es el futuro, es el presente. Es radioterapia molecular de precisión y personalizada. No es matar moscas a cañonazos, como otras técnicas. Es ir directamente a la célula tumoral, meterle radiación y destruirla in situ sin afectar a los tejidos sanos circundantes”, celebra.

El médico cree que en los años venideros se logrará obtener moléculas que combatan todo tipo de tumores, así como lo lleva a cabo el Inhibidor de la Proteína de Activación de Fibroblastos (FAPI), proteína afín a las células de diversas neoplasias malignas.
Carreras dice:
“Casi todos los tumores tienen fibroblastos [un tipo de célula abundante en los tejidos fibrosos] revueltos con las células tumorales. Con el FAPI puedes enviar la radiación a los fibroblastos, pero, como el alcance de la radiación del lutecio-177 es de uno o dos milímetros, destruyes también las células tumorales. La ventaja del FAPI es que vale para cualquier tipo de tumor”.

La oncóloga Teresa alonso, dice:
“La teragnosis es un concepto muy bonito y viene fortísimo para el tratamiento del cáncer de próstata”.
El tratamiento experimental fue formalmente presentado en el reciente congreso, actualmente se encuentra bajo desarrollo por parte de la empresa biofarmacéutica estadounidense Endocyte.
A raíz de investigaciones previas realizadas en el año 2016 en este campo, ya había sido posible observar el potencial de esta técnica aplicada en la terapia.

Teresa Alonso, oncóloga del hospital madrileño Ramón y Cajal, señala que observando los pros y contras de esta nueva técnica, es posible llegar a la conclusión de que los beneficios predominan, y lo será mucho más si la técnica es aplicada en etapas temprana en los pacientes afectados, aunque menciona que el concepto es algo “antiguo”, sin duda se pondrá en uso de forma reiterada.
También agregó que una estrategia similar es aplicada desde hace décadas contra el cáncer de tiroides, en ese tipo de técnica se utiliza el yodo-123 para el diagnóstico y yodo-131 para el tratamiento.
Además, en años recientes esta técnica se ha utilizado para el combate de tumores neuroendocrinos, con una incidencia anual de menos de 10 casos por cada 100.000 habitantes.
Aunque mencionó que la teragnosis es un concepto muy bonito y es algo que viene con bastante fuerza contra el combate del cáncer de próstata, hay que ser claros en algo: “La técnica NO es de ninguna forma la cura del cáncer de próstata, obviamente”.

La teragnosis ha recibido elogios por parte de miembros de la comunidad científica, señalando que es importante la investigación de terapias alternas a las terapias tradicionales utilizadas en el combate del cáncer, esto lo menciono Lorie Pierce a través de un comunicado. Inclusive, Michael Morris, jefe del departamento de cáncer de próstata en el Sloan Kettering, mencionó que las autoridades deberían estudiar la posibilidad de convertir el 177Lu-PSMA-617 en un nuevo tratamiento estándar para los pacientes afectados de este tipo de cáncer agresivo.

Teragnosis: una nueva terapia - Teragnosis: una nueva terapia

El médico Carreras expresó que lamenta la tardanza de diversas agencias encargadas de regular los medicamentos utilizados al momento de que sean aprobadas las nuevas terapias.
Uno de los problemas más significativos es sin duda el elevado precio.
El médico hace cálculos y menciona que un tratamiento basado en teragnosis de un tumor neuroendocrino, tiene un costo aproximado de unos 65.000 euros por paciente.
Sin embargo también añade:
“Logra una supervivencia más larga que las otras alternativas y el precio es competitivo. No es más caro que la quimioterapia a la que sustituye”, argumenta.

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