Científicos descubrieron un fósil increíblemente raro de tardígrado atrapado en ámbar de 16 millones de años. Esta es una especie nunca antes vista de tardígrado, también llamado oso de agua o lechones de musgo.
Los tardígrados se encuentran en cualquier lugar de la Tierra con entorno húmedo. Son conocidos por ser supervivientes a condiciones extremas de temperatura, presión y radiación.
Gracias a las características que los vuelven prácticamente indestructibles y a su tamaño se han descubierto muy pocos fósiles, exactamente tres.
Una investigación publicada presenta una nueva especie de tardígrado descubierto en ámbar de la República Dominicana. El fósil data de la época del Mioceno, hace aproximadamente 16 millones de años.
El equipo de investigadores lo han llamado Paradoryphoribius chronocaribbeus, los fósiles anteriores de tardígrados se llaman Milnesium swolenskyi y Beorn leggi.
El biólogo de desarrollo evolutivo, Frank Smith dijo:
“Realmente solo hay dos tardígrados claros en el registro fósil, por lo que es realmente emocionante encontrar un tercero”
Descubriendo sin querer
El tardígrado atrapado en ámbar mide menos de 0.6 milímetros de largo. Según los investigadores su descubrimiento fue cuestión de suerte. El objetivo del ámbar era buscar hormigas para estudiar la evolución social con hormigas y termitas.
Pero en algún momento, un miembro del laboratorio notó una forma achaparrada, parecida a una oruga, con pequeñas patas con garras que sobresalían de su parte inferior. Habían encontrado un tardígrado flotando en el ámbar, junto a tres hormigas, un escarabajo y una flor.
Además del descubrimiento, el tardígrado se encontraba cerca de la superficie lo cual facilitó su observación con el microscopio. Este es el primer fósil de tardígrado en el que se pudo visualizar la morfología interna.
Los investigadores identificaron al oso de agua como parte de la superfamilia Isohypsibioidea, un grupo diverso de tardígrados modernos. Esto convierte a P. chronocaribbeus en el miembro más antiguo conocido de la superfamilia.
La anatomía interna del oso de agua lo diferencian de los tardígrados relacionados. Una estructura dura que se encuentra entre la boca y el esófago, llamada macroplacoide, tenía una forma única. En otros miembros de Isohypsibioidea tienen de dos a tres macroplacoides gruesos, el nuevo fósil tardígrado tenía solo uno delgado, marcado con una cresta.
Esta característica distintiva lo hizo no entrar en la misma superfamilia por lo que los investigadores crearon una nueva especie para poder clasificar a P. chronocaribbeus.