La startup japonesa “Sumitomo Forestry” se asoció a la Universidad de Kyoto para desarrollar los primeros satélites hechos de madera.
La idea es cooperar a la reducción de basura espacial que se ha acumulado en cada lanzamiento.
En teoría los satélites al estar hechos de madera, se deberían quemar al reingresar a la atmosfera terrestre concluido su ciclo de vida.
Otra gran ventaja es que al construirlos de madera se podría permitir el paso de las ondas electromagnéticas permitiendo colocar las antenas en el interior.
Poder colocar las antenas en el interior de la estructura los vuelve más simples de diseñar e implementar.
El siguiente paso es la investigación para saber cuál es el tratamiento y la madera más apta para resistir las condiciones espaciales.
Actualmente se encuentran aproximadamente 6,000 satélites orbitando la Tierra y solo el 40% están operativos.
En este video de la NASA puedes darte una idea de la gran cantidad de basura espacial que hay.
Solo SpaceX ha puesto en órbita casi 1,000 de sus satélites Starlink, su aporte al espacio es que arderán a su reingreso al término de su vida útil.