La NASA y la Agencia Espacial Canadiense cuentan con un nuevo telescopio, SuperBIT. Es un telescopio que no es terrestre, pero tampoco es espacial.
Fue diseñado para contar con las ventajas de uno espacial, pero con el coste de uno terrestre. Esto por el lugar donde operará: al borde de la atmósfera.
Desarrollado por las universidades de Durham, Princeton y Toronto. Se elevará lo suficiente para superar el 99.5% de la atmósfera terrestre para obtener vistas claras y sin contaminación.
Al no haber atmósfera de por medio, las imágenes serán más claras y precisas. El telescopio hará uso de un gigantesco globo que lo llevará a altas distancias. Los globos que se usarán serán los globos de superpresión especiales que permiten al SuperBIT estar más tiempo en el aire.
Se planea lanzarlo el próximo mes de abril de 2022. Rodeará la Tierra varias veces y caerá de vuelta a la superficie. Sin embargo, puede volver a ser lanzado con un nuevo globo.
Es una de las grandes ventajas del SuperBIT ya que no se tiene que transportar al espacio y esto resulta en algo mucho más económico. Su coste será de unos 5 millones de dólares aprox., unas mil veces más barato que un satélite espacial con las mismas capacidades.
