La NASA intentará desviar un asteroide para después estudiar su trayectoria durante dos años en una misión llamada DART. Esta será la primera misión de su programa de defensa planetaria que busca encontrar métodos para proteger la Tierra en caso de una amenaza de impacto de asteroide.
La misión DART será el primer intento de desviar un objeto espacial mediante lo que los expertos llaman un “impacto cinético” y se desarrollará en 2022. La idea es que el impacto le haga cambiar la trayectoria del asteroide, como cuando chocan dos bolas de billar.
El operativo consistirá en lanzar la nave DART para que viaje a través del espacio y estrellarlo contra el asteroide Dimorphos, el más pequeño de Didymos, un sistema binario de asteroides cercanos a la Tierra. Su cuerpo principal mide unos 780 metros de ancho, mientras que su luna menor apenas alcanza 160 metros de diámetro.
El proyectil que planea golpear a Dimorphos es una nave de bajo costo que puede viajar a 6,6 km por segundo. La misión va equipada con paneles solares que al desplegarse miden 8,5 metros de largo cada uno, cámaras y un CubeSat que se desprenderá unos días antes del choque para capturar imágenes del impacto.
Aunque estos asteroides pasarán cerca de nuestro planeta, no representan amenaza alguna. Por esta razón se convierten en el blanco óptimo para demostrar que el programa de defensa planetaria es eficaz.