El sábado se iba a hacer el lanzamiento del Starliner de Boeing y de la NASA, pero se pospuso para el día siguiente día. Por desgracia, el lanzamiento del día siguiente también se canceló por seguridad.

El objetivo era lanzar la capsula este sábado al mediodía y hacer que los astronautas pudiesen llegar a la ISS con éxito. El detalle es que se tenía que hacer una prueba final del sistema.

¿Por qué cancelaron el lanzamiento del Starliner?

El mismo sábado los dueños de Boeing, la NASA y ULA dieron una conferencia de prensa y hablaron de lo que sucedió y de lo que harán.

“La decepción dura aproximadamente tres segundos”, dijo Mark Nappi, vicepresidente y gerente del programa de tripulación comercial de Boeing. “Y luego te pones inmediatamente ocupado y haces tu trabajo”. En caso de algún fallo, el plan B era hacer un lanzamiento el domingo al mediodía.

Pero el sábado por la noche, la NASA anunció la cancelación de ese lanzamiento del domingo “para dar al equipo tiempo adicional para evaluar un problema con el equipo de soporte en tierra” en el sitio de lanzamiento de Florida. La NASA dijo que proporcionará más actualizaciones. El próximo intento será entre el 5 y 6 de junio.

Ahora mismo están tratando de encontrar el motivo de la falla. Tory Bruno el CEO de ULA dijo “Sospechamos que la culpa es de un problema con la red o con el hardware”. Con esas palabras confirmó que la investigación no se ha completado todavía.

La suspensión del lanzamiento se emitió automáticamente el sábado anterior por una razón no especificada, según la transmisión de la NASA, con menos de cuatro minutos restantes en la cuenta regresiva.

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No es la primera vez que se cancela el lanzamiento del Starliner

En mayo, la NASA y Boeing ya habían cancelado un intento de lanzamiento porque se dieron cuenta de que había un problema con en el cohete. ULA, una empresa conjunta de Boeing y Lockheed Martin, cambió la válvula que no estaba funcionando bien.

Después de eso, también encontraron una “pequeña” fuga de helio en la Starliner. Todas estas fallas los llevaron a hacer una revisión mucho más completa. Luego de la revisión, la NASA y Boeing localizaron la fuga, que estaba en el sistema de propulsión.

Sin embargo, los funcionarios dijeron el 24 de mayo que la fuga está “estable” y “no representa un problema de seguridad en el vuelo”. El debut de la tripulación de la Starliner se ha retrasado durante años. Por culpa de los retrasos del lanzamiento, Boeing ha tenido que gastar casi 5.000 millones de dólares.

En un momento, se llegó a pensar que el lanzamiento del Boeing podía competir con el lanzamiento del Dragon. Esta última ha llevado y traído astronautas de la NASA desde el 2020 y ha hecho funciona su programa de Tripulación Comercial.

Sin embargo, varios contratiempos y retrasos han relegado gradualmente a la Starliner a una posición secundaria para la NASA, y la agencia tomó la inusual medida de reasignar astronautas de los primeros vuelos de la tripulación de Boeing en 2021. Boeing tiene un contrato para realizar seis misiones operativas de la Starliner a la ISS.

La prueba de vuelo con tripulación que estaba programada para el sábado representa el paso final importante antes de recibir la certificación de la NASA para comenzar misiones regulares.

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