El cambio climático está impulsando la tasa de derretimiento del hielo, tanto en el hemisferio norte como en el hemisferio sur.
Las imágenes tomadas por satélite muestran un aproximado de más de 28 billones de toneladas de hielo derretido en Groenlandia y en la Antártida.
Esta pérdida de hielo es equivalente a una capa de 100 metros de grosor del tamaño de Reino Unido.
Esta escala de derretimiento es demasiado grave, ya que de seguir a ese ritmo se tendrán impactos en comunidades costeras este mismo siglo.
Durante décadas los científicos han advertido sobre este cambio que actualmente parece ya estar aquí sin señas de poder parar a corto plazo.
Los investigadores han visto un aumento del 60% en pérdida global de hielo en un transcurso de 23 años.
La imagen destacada muestra una estimación si la pérdida fuera un cubo de hielo que midiera 10x10x10 kilómetros. Técnicamente más alto que el monte Everest.
La temperatura de la Tierra continúa aumentando, incrementando el derretimiento de glaciares tanto de hielo marino como de montañas en todo el mundo.
Los glaciares representan solo el 1% del volumen total de hielo en la Tierra, pero los investigadores han descubierto que contribuye con casi una cuarta parte de toda la perdida de hielo global.
Todo esto representa 35 milímetros de aumento al nivel del mar, el hielo del sur que demostró ser más resistente ya ha comenzado a derretirse.
Los informes concluyen que desde 2012 la perdida de hielo Ártico se ha triplicado comparado a las dos décadas anteriores.
El derretimiento contribuye directamente a aumentar ya que al disminuir el hielo también lo hace la superficie que refleja la radiación solar hacia el espacio.
Las estimaciones concluyen en que por cada centímetro que aumente el nivel del mar, un millón de personas corren peligro a ser desplazadas.