Un equipo de neurocientíficos de la Universidad del Noroeste en Estados Unidos han desarrollado una técnica de etiquetado fluorescente que les permite traducir las conexiones sinápticas de las moscas y leer algunas experiencias que hayan vivido recientemente.
Estas señales fluorescentes permiten etiquetar diferentes neuronas con el fin de determinar qué neuronas estuvieron activas durante un estímulo sensorial. Estas señales permanecen activas durante unas cuantas horas y permiten identificar señales complejas tales como una respuesta para evitar el calor o el estímulo al aroma de un plátano que activó esas conexiones, afirma Marco Galio, el líder del grupo.
Esta nueva técnica podría tener un gran uso para obtener información sobre los procesos neuronales subyacentes en el funcionamiento del cerebro humano.