Después de que la cápsula radiactiva recientemente desaparecida fue encontrada contra todo pronóstico, los Redditors han estado compartiendo varias historias sobre cuando las personas no tuvieron tanta suerte y tuvieron encuentros con materiales radiactivos.
En un incidente particularmente angustiante en la Ciudad de México en 1962, una familia estuvo expuesta prolongadamente a una fuente radiactiva y comenzó a enfermarse sin saber por qué. En marzo de 1962, una familia se mudó a una casa en la Ciudad de México, y dentro había un pequeño recipiente de plomo.
«La fuente fue entregada a la familia para que la mantuvieran y la vigilaran sin que ninguno de los miembros de la familia supiera exactamente lo que era el recipiente y lo que contenía», señaló un informe sobre los envenenamientos de los médicos de la familia.
En algún momento entre la mudanza y abril, la fuente radiactiva fue retirada del recipiente de plomo y terminó en el patio. Luego fue encontrada por el niño de 10 años, quien puso la cápsula radiactiva de cobalto-60 en su bolsillo y la llevó a la casa.
Su madre luego tomó la cápsula del bolsillo del pantalón y la colocó en un cajón de la cocina. Más tarde ese mes, la madre del sobreviviente se mudó a vivir a la casa. En ese momento notó por primera vez la decoloración de los vasos de cristal que se guardaban en el mueble donde estaba la cápsula».
El ennegrecimiento de los vidrios ha sido descrito en otros informes de exposición a la radiación. A pesar de lo extraño que pueda ser, no alertó a ninguno de la familia sobre lo que estaba sucediendo.
El equipo intentó determinar las dosis de radiación que recibió la familia, lo cual no fue una tarea fácil, dado que se movían dentro y fuera de la casa, y el equipo tuvo que tener en cuenta cosas como la cantidad de radiación que se dispersó y se absorbió por los objetos alrededor de la casa. Utilizando información del único sobreviviente sobre las rutinas de la familia, el equipo pudo estimar la exposición.
El 29 de abril, el niño de 10 años falleció. Después de esto, su hermana menor de 2 años pasó más tiempo dentro de la casa con la familia, cerca de la fuente radiactiva. La madre murió el 19 de julio y la cápsula radiactiva finalmente fue encontrada y retirada de la casa. Sin embargo, la radiación ya había causado daño y resultó en la muerte de la hija de 2 años el 18 de agosto, seguida por la abuela el 15 de octubre.
El padre, el único sobreviviente, recibió alrededor de 990-1,200 dosis de radiación absorbida (rad) debido a su tiempo lejos de la fuente, lo que fue mucho menor que la dosis recibida por el niño (4,700-5,200 rad).
